Vestirse dice algo de nosotros, pero no nos devela completamente, siempre queda algo por conocer.
La ropa es un texto, un discurso que debe ser leído. El vestirse nos posibilita entrar en diálogo con los demás….
Interés en la experimentación. Experimentación de uno mismo…
Mediante la descomposición de elementos y su posterior composición de “manera inusual” se crea un nuevo concepto de la forma de vestir y por ende, una constante búsqueda de identidad. Algo así como: Estilo individual e insólita combinación.
Mezcla de géneros caros y baratos, de ayer y de hoy. Moldear prendas existentes para crear otras nuevas, o mejor, unir historias de todo tipo, edad y color…
La fragmentación construye una estética abstracta y laberíntica, en donde cada fragmento opera independientemente, pero, a su vez, queda encadenado al continuo temporal de un instante narrativo único.
Un reto que se relaciona con la búsqueda de un nuevo papel para estos materiales: UnA nUEva HisTorIa
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